¡Abran el grifo!

25 de mayo de 2020

TEMAS: Valor razonableeconomía

Nos encontramos en una situación sin precedentes donde también debemos tomar medidas extraordinarias para anticipar lo que se viene para la economía; no podemos dejarlo para el día después. El gobierno debe buscar la manera abrir el grifo para que fluya el dinero a través de todo el sistema y así salvar empleos y reactivar la economía.

Los bancos están siendo cautelosos para estar preparados para lo que viene. Se ha declarado la moratoria y les ha tocado modificar una cantidad importante de sus préstamos. Por tal razón deben cuidar su liquidez para hacerle frente a los pagos de los intereses de los ahorradores, pagar sus gastos de funcionamiento y poder navegar las aguas una vez pase el estado de emergencia.

Para préstamos nuevos, ¿cómo evaluarán ahora prestarle dinero a un vendedor de autos que no está vendiendo, a un empresario que todavía es muy temprano para saber cómo se han afectado sus ingresos o a un constructor si no se sabe si va a poder vender o no? Todo esto se traduce en menor dinero disponible para prestar.

El gobierno ha dicho que está trabajando en medidas económicas, pero todos estamos a la expectativa de medidas más concretas. Los préstamos del Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de Desarrollo y construir obras no son suficientes. En otros países los gobiernos canalizan préstamos condonables si se usan para planilla y no despedir. También podrían garantizar préstamos con propósito definido, con reglas claras para los “juega vivo”, para que de esta manera los bancos puedan abrir la llave y prestar con tranquilidad. Finalmente, también han dado bonos similares al bono solidario, pero más robustos.

La consecuencia inevitable es que las épocas de deuda/PIB de alrededor de 40% ahora se verán por el retrovisor. Un punto muy importante es que la corrupción es de las cosas más graves que tiene el país. No es momento para robar ni ahora ni nunca pero más ahora cuando la gente está pasando hambre y hay tanto en riesgo. Lo triste es que los que más sufren con la corrupción son los menos favorecidos; debe haber certeza del castigo.

No podemos esperar hasta el día “D” (después) para ver qué medidas se van a tomar. Si ya hay medidas definidas, anúncienlas porque el solo hecho de saber levanta el sentimiento del consumidor y permite a los empresarios reorganizarse.

Si ya las anunciaron, anúncienlas mejor para reducir la incertidumbre. Si solo son las que ya han anunciado, no son suficientes. Hay que abrir el grifo y poner el dinero a fluir para salvar empleos y reactivar la economía.

Editor: Álvaro Naranjo